El martes 14 de junio se bajó la campana mediana de la iglesia parroquial Santa María de Robines, lo que creó gran expectación entre los binissalemers y binissalemeras, presentes también Josep Ramón Ortega, párroco, Kika Coll, directora insular de Patrimonio y Víctor Martí, alcalde de Binissalem. Esta campana, la mediana de las tres que hay en el campanario, fue fundida en 1664. En fechas recientes, ingenieros técnicos han detectado una rotura en varias de las asas, es desde donde se sujeta a la tolva. Por este motivo se ha procedido al desmontaje de la campana y de la tolva y, con el control y permisos de la Delegación de Patrimonio del Obispado de Mallorca y de la Dirección Insular de Patrimonio del Consell de Mallorca, se procederá a realizar una propuesta de restauración.
