Semana Europea de la Movilidad

Del 16 al 22 septiembre se celebra la Semana europea de la movilidad que promueve hábitos de movilidad más sostenibles, seguros y saludables como son los desplazamientos a pie, en bicicleta, en transporte público o en vehículo eléctrico, así como visualizar los cambios posibles en el uso del espacio público, mejorar la calidad del aire y la reducción de la contaminación.

Con el lema ‘Haz salud. Muévete de forma sostenible’ y en línea con el tema de este año, «Seguridad y salud con una movilidad sostenible», la Semana del 2021 quiere incidir en cuatro temas: la salud mental y física, la seguridad y la respuesta ante la Covid-19. No es una coincidencia que la salud mental sea un tema prioritario, ya que la Semana Europea de la Movilidad quiere centrarse en la estrecha relación que existe entre la salud mental y la movilidad urbana, un tema que se ha convertido especialmente importante durante la pandemia. Otro punto prioritario es la salud física, que incluye el impacto de la contaminación acústica y atmosférica, y los beneficios que tiene una movilidad activa. En el ámbito de la seguridad en el transporte queremos destacar mejoras recientes en la seguridad, la integración de personas con movilidad reducida y la aplicación de medidas de seguridad vial en el entorno urbano. También se quiere destacar la respuesta de las administraciones ante la Covid-19, y centrarnos en los aspectos positivos de la pandemia en la movilidad urbana y la importancia de restablecer la confianza en el transporte público.

Los objetivos principales de la Semana son los siguientes:

  • Estimular un comportamiento ciudadano, en relación con el uso del vehículo, compatible con el desarrollo urbano sostenible, en particular con la protección de la calidad del aire, la prevención de accidentes de tráfico, la reducción de emisión de gases que provocan el efecto invernadero y el consumo racional de los recursos energéticos.
  • Sensibilizar a la ciudadanía sobre los impactos ambientales del transporte e informarla sobre sus diferentes modalidades.
  • Impulsar el uso de los medios de transporte sostenibles y, en particular, el transporte público, la bicicleta, la movilidad a pie y los vehículos eléctricos.
  • Potenciar un reencuentro de la ciudadanía con la ciudad, su gente y su patrimonio cultural, en un entorno saludable y relajado.
  • Reflexionar sobre cómo afecta a nuestra salud el uso excesivo del transporte motorizado. Por un lado, la contaminación atmosférica y la congestión que generan tienen un impacto negativo sobre los sistemas respiratorio y cardiovascular. Por otra, propician el sedentarismo y la inactividad física.